domingo, 10 de febrero de 2008

Ayer...Hoy...Mañana


Ayer...Hoy...Mañana

El fresco aroma de la mañana
me trajo ganas de ti.
El pan de nuestros moldes sacia
los apetitos.
Tus caricias ungüento florido
que palpitan en los sentidos,
otrora perdidos,
hoy anclados a tu vestido.
La piel que vestimos se reconoce,
va vistiendo arrugas
tersas...a veces duras
duerme entre algodones, delicioso goce.
Las campanas visten tardes de otoño
murmullos dorados de nuestras canciones.
En el quicio prendido quedó mi espejo
en tu vientre escondido quedó mi abrigo,
en tu calma suspiro y en ella...en ella vivo.

Marcial cortegoso

Poesía


Poesía


La poesía llega, viene, se va,
deja, pega, revuelve, asienta,
emociona, palpita, llora, canta.
La poesía camina en mis huesos,
en mi último cuerpo,
la niña huérfana de mis sentimientos,
que regurgita palabras
arrancadas de las entrañas,
que muestra tus rincones
llenos de momentos hambrientos,
de los eternos ausentes,
que en el colgador del tiempo
descansan dormidos, esperando oídos
que recojan sus voces, lágrimas de gloria.

"Tiempos" de "Nadas"


“TIEMPOS” de “NADAS”

El tiempo se adueña de mí,
me envuelve en su manto,
me ahoga su incertidumbre,
me llena su soledad;
¡nada importa nada!
y sin embargo,
me importa el tiempo;

quizás porque su camino,
me lleva a la nada,
y la nada en sí es el todo,
el todo de la hipocresía,
el todo de la desidia,
de la materia transformada,
en puro materialismo;

de un egoísmo aderezado
de frivolidad, el extendido dogma
de la futilidad.

Todo es todo, y en sí, es nada;
polvo en el polvo, viento en el viento,
semilla en las entrañas, y al final,
¡NADA!
Marcial Cortegoso